50 reptiles, 12 mamíferos y 2 aves conformaron el grupo de animales que fueron liberados tras ser atendidos y rehabilitados en el Centro de Atención y Valoración del Área Metropolitana y el Hogar de Paso de Corantioquia. Con ellos, ya son 469 los individuos de la fauna silvestre que el equipo del convenio entre las autoridades ambientales ha regresado a la libertad en 2021.
Los animales fueron llevados hasta el Bajo Cauca antioqueño, donde se localiza el predio Natalia, de Mineros S.A., empresa que desde el año 2014 participa en el programa de reubicadores de fauna silvestre de la sociedad civil, de Corantioquia. El territorio tiene una extensión de 850 hectáreas, de las cuales 276 son de bosque nativo y cerca de 100 se han destinado a corredor biológico; además cuenta con dos quebradas que brindan condiciones óptimas para el hábitat de las especies acuáticas.
Ana Ligia Mora Martínez, directora general de Corantioquia, destacó que la participación de la sociedad civil en estos procesos es fundamental, pues no solo contribuye a consolidar los esfuerzos que se hacen desde la autoridad ambiental para la conservación de la biodiversidad, sino que es un gesto de corresponsabilidad que aporta a la construcción de territorios sostenibles.
“Una de las principales funciones del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, como autoridad ambiental de lo urbano, es acompañar la fauna silvestre, en razón de lo cual, y gracias al convenio que existe con Corantioquia y que opera Precoodes, logramos la liberación de estas 64 especies, las que lograrán recuperar sus competencias naturales para aportar al desarrollo del medio ambiente”, dijo, por su parte, el director del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, Juan David Palacio Cardona.
Los individuos que ahora permanecen libres en esta zona son 20 tortugas morrocoy (Chelonoidis carbonaria), 10 tortugas caja (Kinosternon leucostomum), 8 tortugas hicoteas (Trachemys callirostris), 7 boas (Boa constrictor), 5 lobos polleros (Tupinambis teguixin), 2 sinsontes (Mimus gilvus) y 12 zarigüeyas (Didelphis marsupialis).
De los 64 animales, 51 fueron atendidos en el Centro de Fauna del Área Metropolitana y 13 en el Hogar de Paso de Corantioquia. Su proceso de rehabilitación duró entre 3 y 6 meses, pues, pese a haber llegado a estos centros en condiciones regulares, debido al maltrato que recibieron durante su cautiverio, mostraron una buena evolución y adaptación adecuada para vivir libres en su entorno natural.
La mayoría fueron recuperados del tráfico ilegal ya que fueron extraídos de su hábitat para ser tenidos como mascotas. Varias de las zarigüeyas llegaron muy pequeñas y con alto grado de vulnerabilidad, caso que ocurre generalmente cuando la madre ha sido atacada y fallece; otra zarigüeya, un macho adulto, fue sometida a una cirugía en su cola, pues presentaba amputación como consecuencia de golpes que recibió.
Las autoridades ambientales reiteraron el llamado a que ¡Paremos Ya! el tráfico de fauna silvestre, especialmente en época de Semana Santa, cuando aumenta el riesgo de comisión de este delito.
Fotos: AMVA
