Desde las cinco y media de la tarde las sillas vacías del escenario Colombia se llenaron. Pancartas, trompetas, fotos y muchas arengas hicieron parte de la final del Festival de Trova Infantil.
Ocho fueron los finalistas y uno proclamado el rey. Hablamos de Jerónimo Aristizábal más conocido como “El Cóndor del Oriente”. Tiene 11 años y desde los 4 empezó su amor por la trova. Su papá quien es un trovador aficionado, además de ser su fan número uno, es la persona encargada de darle ánimo cuando él no lo tiene.
“A los seis años empecé a estudiar trovar. Estuve entrenando durante mucho tiempo para esto. Cuando se acercaba la feria entrené aún más. Con mucha disciplina”, nos cuenta Jerónimo, quien desde que se levanta hasta que se acuesta está trovando.
“El Cóndor del Oriente” tuvo que pasar invicto las 4 modalidades (tema libre, tema impuesto, ratoneo y objetos) para proclamarse Rey Infantil de la Trova.
“A todo lo que yo veía le sacaba trova y si me hablaban yo les contestaba trovando. Las clases las tenía los martes, miércoles, jueves y los sábados. Pero no crean que no tengo tiempo para mis amigos porque juego ‘play’, fútbol y salgo a caminar para distraerme. Aunque es difícil, no todo puede ser trova”, afirma en medio de risas y su voz ya afectada por las casi 4 horas sobre el escenario.
Con disciplina, lectura y mucha concentración Jerónimo, habitante de la vereda la Laja, en Rionegro consiguió el título, por el que desde hace 4 años ha estado trabajando.
“Esto es de constancia. Yo he participado en cuatro festivales. En los dos primeros no pasé a las finales y en el del año pasado quedé príncipe”, dice.
Aunque hubo momentos en los que no respondía rápido a sus contrincantes, contestaba con coherencia y tenacidad porque como lo afirma él, “acá no gana el que más rápido conteste. Gana quien conteste con inteligencia”.
Jerónimo se llevó el primer lugar en esta edición del Festival de Trova Infantil y espera que para el próximo año, pueda conservar su título.
- Fotos: Alcaldía de Medellín
