Con la firma del alcalde de Medellín, Daniel Quintero Calle, quedó oficializada la Política Pública de Libertad de Cultos, mediante el acuerdo 052 aprobado por el Concejo de la Ciudad. Con esta política, que contó con la participación de más de 1.200 personas para su elaboración, se garantizará que la ciudadanía pueda expresar de manera libre y espontánea sus creencias religiosas.
“Hay que darle las gracias a todas las comunidades religiosas, por lo que han servido y sirvieron en medio de la pandemia y en general porque son espíritu para muchas personas. Esta es una Alcaldía laica y garantiza todas las creencias, todos los cultos, incluso para las personas que no creen”, explicó el mandatario.
El concejal del partido Mira, Juan Felipe Betancur, lideró esta iniciativa y destacó la importancia de esta política pública integral, para garantizar la libertad de cultos como derecho fundamental consignado en la Constitución Política colombiana.
“Estábamos en mora de poder generar una política pública de libertad religiosa para la ciudad de Medellín. Es una política pública amplia, integral, que va a fortalecer las instituciones, las entidades religiosas y que estas van a poder desarrollar su libre culto dentro de sus lugares de reunión de una manera tranquila”, indicó el concejal.
Como parte del trabajo para garantizar la libertad de creencias religiosas y la elaboración de la Política Pública, la Administración Municipal ha caracterizado más de 100 organizaciones basadas en la fe desde el año 2020 y se contó con la participación de más de 3.600 personas para la conformación del Comité Técnico de Libertad de Creencias y de Cultos.
“Hay voluntad de la Administración Municipal. Lo más importante ha sido acercarnos a las comunidades religiosas para recuperar la confianza. Uno se reúne con este comité y dicen ¿qué le vamos a dejar a la ciudad?. Y esa es la esencia de creer y es la esencia de lo religioso pensar qué se le deja a la comunidad”, manifestó el secretario de Participación Ciudadana, Juan Guillermo Berrío.
Durante el proceso también se adelantaron cinco asambleas zonales, en las 16 comunas y cinco corregimientos, donde se socializaron los alcances, funciones e impactos del Comité de Creencias y Cultos.
