Por: Maria Fernanda Sierra Cano
Víctor Ramírez y Dalida Morales, dos jóvenes líderes del Suroeste de Antioquia le apuestan hoy a mejorar las condiciones de vida del campesinado, a la agroecología y a la política. Ambos han creado en el municipio de Jericó un proyecto económico de carácter agroecológico denominado Urantia, el cual consiste en la producción de una diversidad de hortalizas y café orgánico y en la producción de refrigerios saludables y ecológicos. Ambos hijos de padres y madres campesinas hoy son reconocidos en el Suroeste de Antioquia como Víctor y Dálida los de Urantia. Su apellido ha cambiado por el nombre de su emprendimiento, con el cual, reiteran en todos los espacios en los que están, en la necesidad de dignificar las condiciones de vida de los y las campesinas y de transitar en las formas de producción a un modelo agroecológico que posibilite conservar de manera integral toda la biodiversidad que coexiste en las fincas. Para lograr esto dice Víctor:
“Es importante empezar a construir desde diferentes lugares. Desde lo social, desde lo cultural, desde lo económico y desde lo político. Cuando conversaba con Dali la probabilidad de lanzarme al concejo municipal de Jericó, me motivó la posibilidad de hacer control político en el concejo en temas de juventud, agrarios, de la economía municipal, de las asignaciones presupuestales que se les dan a diferentes programas y proyectos. En los colectivos, también, lo hemos conversado mucho porque no es fácil asumir este rol, pero pensamos que las transformaciones que soñamos deben estar tanto en el activismo social como en el campo político, en ambos se toman decisiones y se realizan acciones fundamentales. Además, hoy el Suroeste tiene la gran Utopía de construir un distrito agrario, ecológico y cultural, ese sueño pasa por un debate a nivel departamental y por un debate a nivel municipal. Ese sueño hay que trabajarlo, pero también hay que defenderlo en lo local y en lo departamental.
Como lo debatíamos en el encuentro departamental de Caminantes de la Utopía, al que fuimos convocados por el candidato a la Asamblea Juancho Muñoz para construir una agenda política departamental desde los diferentes municipios y colectivos sociales, la soberanía alimentaria y el agua deben estar en el centro del debate y el control político en Antioquia. Allí los y las candidatas que asistimos suscribimos un manifiesto en pro de ello, manifestar es actuar, así que desde la Asamblea departamental de Antioquia y los concejos municipales adquirimos un gran compromiso: defender la vida, el alimento, el agua y la naturaleza en las diferentes subregiones”.
Víctor y Dálida han trasegado desde su nacimiento por las veredas del municipio de Jericó y ha sido bajo el cobijo del campo, la tierra, el cultivo y el agua, donde han construido sus Utopías, las cuales están permeadas por el olor de la vereda la Fé de dónde Dálida es oriunda y por las montañas de las veredas la Aguada, la Traviesa y Castalia donde Víctor ha trasegado su niñez y su juventud. En su discurso se puede leer una constante: la utopía, la transformación y el campo, pero ¿A qué se refieren cuando hablan de Utopías?
“A la Utopía de luchar por la vida digna de los y las campesinas, a la Utopía de que en el cetro esté la soberanía alimentaria, como una política de cuidado de la vida, a la Utopía de que las instituciones del Estado empiecen a construir con las comunidades distritos agrarios, ecológicos y culturales, a la Utopía de que estas mismas instituciones empiecen a comprender que el apoyo al sector agrario va mucho más allá de dar un bulto de abono o de endeudar con créditos a los y las campesinas”, dice Víctor.
“A la Utopía de que las juventudes encuentren en el campo la posibilidad de desarrollar su proyecto de vida con orgullo y con pasión y que la migración a la ciudad no sea la única opción que se nos presente”, dice Dálida.
Ambos, desde su profesión como tecnólogos en producción agropecuaria ecológica del SENA, se han dado a la tarea de empezar a materializar esta Utopía en el municipio de Jericó, no solo con su proyecto agroecológico Urantia, sino también, con su participación y liderazgo en organizaciones como: la Asociación de mercados campesinos de Jericó, el colectivo Mujeres Tierra y vida, el colectivo Imagina Jericó, el Movimiento Independiente de Jóvenes del Suroeste – MIJOS, la plataforma Visión Suroeste, los mercados provinciales que se han dado en la provincia del Cártama, la red de regeneradores del Suroeste y el proyecto político Caminantes de la Utopía. Todo este trabajo con las comunidades y con su proyecto ha germinado una buena cosecha, posicionándose en el año 2022 como los ganadores de Antójate de Antioquia, en el área de crecimiento verde.
Visto desde este punto y desde la articulación que hoy tienen las juventudes del Suroeste con los procesos sociales, las comunidades y las problemáticas de su subregión, da la sensación de que en el Suroeste de Antioquia viene floreciendo una juventud que no le teme a articular su proyecto de vida con los procesos sociales y los ejercicios políticos de carácter representativo.
